Una calle abarrotada de ansiosos pequeños ojos chispeantes aguardaban esta tarde a la cabalgata de Reyes. El recorrido desde el puesto de Cruz Roja hasta la Iglesia se llena de niños impacientes por ver a los Magos. Los verdaderos protagonistas de esta noche magia son los más pequeños, sobre los hombros de sus padres, corriendo junto a las carrozas atrapando caramelos o callados con el corazón palpitando de ilusión mientras desfilan delante de ellos.

Hicieron su aparición calle abajo amenizados por la banda municipal con sus gorros rojos al empezar a anochecer.Como viene siendo habitual la primera carroza es la gran estrella de Oriente.
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Después la carroza que lleva al niño, la Virgen y San José. De momento el buey y la mula siguen presentes en la representación del Portal.

Sus Majestades los Reyes de Oriente: Melchor, Gaspar y Baltasar con sus respectivos pajes y remolques repletos de juguetes.

Para terminar la caravana, los habituales voluntarios de Cruz Roja y Protección Civil, que dirigen el tráfico en la calle y dentro de la Iglesia de San Juan Bautista.
La ilusión se palpa en el ambiente. Los chicos empiezan a llenar los bancos de la Iglesia a la espera de ver en persona a los Reyes Magos. Se conforman con el regalo que reciben, al menos hasta la mañana del domingo. Van entrando los integrantes de las carrozas por la pasarela formada este año en la escalinata de la Iglesia.

Al final, entran Sus Majestades en la Iglesia. El griterío es ensordecedor. Es tiempo de ilusión. Los nervios se notan en las filas que esperan a decirle a su Rey favorito que han sido buenos y que se merecen, por lo menos, todo lo que han pedido.

Como es habitual, un enlace con todas las fotos, para quien las quiera coger.
http://sdrv.ms/VG8Df8